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La segmentación ABC y XYZ se basa en la clasificación de referencias según su relevancia y frecuencia de uso, respectivamente.
En artículos anteriores ya hemos hablado acerca de dos tipos de segmentación, la segmentación ABC y la segmentación XYZ. Ambas metodologías resultaban especialmente útiles si las aplicábamos en la cadena de suministro de nuestra empresa y nos permitían gestionarla de forma más eficiente. Pero ¿qué pasaría sin juntamos ambas metodologías y las combinamos en la gestión de la cadena de suministro? ¡Hoy te presentamos la segmentación ABC-XYZ!
En este artículo mostraremos cómo la segmentación ABC-XYZ puede ser una herramienta poderosa para optimizar la cadena de suministro de cualquier empresa. Además, presentaremos nuestra plantilla de Excel especialmente diseñada para simplificar la implementación de esta estrategia en tu negocio, la cual te permitirá ingresar tus propias referencias y obtener una segmentación clara y precisa de acuerdo con los criterios ABC-XYZ. ¡Empezamos!
La segmentación ABC y XYZ se basa en la clasificación de referencias según su relevancia y frecuencia de uso, respectivamente. Para lograr una clasificación óptima, es importante establecer rangos que permitan diferenciar claramente entre las distintas categorías.
En el caso de la segmentación ABC, los rangos óptimos se basan en el principio de Pareto, también conocido como la regla 80/20. Según este principio, aproximadamente el 80% de los efectos proviene del 20% de las causas. En el contexto de la clasificación de referencias, esto se traduce en los siguientes rangos:
Estos rangos permiten una diferenciación clara entre las referencias de mayor, mediana y menor importancia.
En cuanto a la segmentación XYZ, los rangos óptimos son:
Estos rangos ayudan a distinguir entre referencias de uso constante, moderadamente variable e impredecible, facilitando así una gestión de información más eficiente y adaptada a las necesidades de los usuarios.
En la implementación de la segmentación ABC-XYZ, resulta especialmente interesante combinar seis meses de datos históricos con seis meses de pronósticos. Al hacer esto, se logra un equilibrio entre la información real del pasado reciente y las proyecciones futuras, permitiendo una visión más completa y contextualizada del panorama en cuestión.
Por un lado, los datos históricos de seis meses nos proporcionan información valiosa sobre las tendencias y patrones que han surgido, ofreciendo una base sólida para el análisis. Por otro lado, al incorporar seis meses de pronóstico, se anticipan posibles cambios, eventos y tendencias emergentes, lo que facilita la toma de decisiones informadas y la adaptación a un entorno en constante evolución.
En conjunto, esta combinación de información histórica y proyectada ofrece una perspectiva enriquecedora y efectiva para abordar y mejorar la gestión de información en cualquier ámbito.
También hay que destacar que, al estar sumando, el importe, cantidad o margen de 6 meses estamos eliminando el efecto de la estacionalidad para el cálculo del ABC, ya que, si analizáramos un periodo inferior, los productos que coincide su pico de ventas con el periodo seleccionado recibirían un peso mayor del que tienen en todo el año, mientras que los que coincide su periodo valle sufrirían una subestimación.
Como ya comentamos en el artículo de segmentación XYZ, cuanto más histórico tengamos de una referencia, más precisa será su descomposición y podremos conocer que parte de su variabilidad se debe a estacionalidades y ciclos, y cuál de ella es más compleja de predecir. Aun así, para un análisis inicial es suficiente, aunque si pretendes elaborar un análisis más exhaustivo recomendamos tener en cuenta todo el histórico disponible.
Al calcular la segmentación ABC-XYZ, es posible utilizar diferentes criterios para clasificar las referencias, como la cantidad, el importe o el margen. Cada uno de estos enfoques tiene sus propias características y puede ser más adecuado según el contexto o el objetivo de la segmentación.
Cada uno de estos enfoques tiene sus ventajas y desventajas, y la elección del criterio adecuado dependerá del contexto y los objetivos de la segmentación ABC-XYZ. Es importante evaluar cuidadosamente las necesidades y prioridades de la organización al decidir qué criterio utilizar para garantizar una gestión de información efectiva y alineada con los objetivos específicos.
Al adaptar las estrategias de pronóstico y planificación según la segmentación ABC-XYZ, se puede mejorar la eficiencia en la gestión de referencias, optimizar la asignación de recursos y adaptar las acciones según las necesidades específicas de cada grupo de elementos. Esto contribuye a una mejor gestión de la información y a la satisfacción de los usuarios al ofrecerles un servicio más adecuado a sus necesidades.
Además de las acciones recomendadas para cada combinación de segmentación ABC-XYZ, es importante realizar un seguimiento y monitoreo constante de los resultados obtenidos. Esto permitirá evaluar la efectividad de las estrategias implementadas y realizar ajustes en caso necesario. Algunas acciones adicionales que se pueden considerar incluyen:
Al llevar a cabo estas acciones adicionales, se fortalecerá la efectividad y la eficiencia de la segmentación ABC-XYZ, permitiendo una gestión de información más precisa, adaptada y estratégica. El seguimiento constante y la mejora continua son fundamentales para garantizar que la segmentación siga siendo relevante y beneficie a la organización en el largo plazo.
En la gestión de la cadena de suministro, identificar los elementos clave que requieren una atención especial puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.